Celaya, Gto.- El gobernador Miguel Márquez Márquez no ha dado la importancia que merece el tema de la equidad de género ni mucho menos se ha preocupado por formular estrategias que disminuyan la violencia en contra de las mujeres, lo que ha desatado casos extremos que ya no únicamente ponen en peligro la vida de ellas, sino también la de los niños; señaló la regidora y presidenta de la Comisión de Equidad y Género del Ayuntamiento, Montserrat Vázquez.
Refirió que desde hace aproximadamente un año hizo una petición al gobierno estatal donde se exponía la preocupación que se tiene por la situación que vive el género femenino en la actualidad, no obstante, hasta el momento no ha tenido respuesta.
En vez de hacer caso omiso, dijo, sería importante que revisara con detenimiento el asunto, para establecer acciones o recursos económicos, humanos y jurídicos, para velar por la integridad de quienes ahora son mayoría en Guanajuato.
Indicó que dentro de la misma Comisión que preside, postuló una política pública en materia de educación, para erradicar la violencia hacia las féminas basadas en recomendaciones hechas directamente por la ONU, sin embargo, el único voto a favor fue el de ella, sin embargo, continuará impulsando acciones a título particular de la regiduría para fomentar el fortalecimiento de la participación de las mujeres, a través de una orientación que genere autonomía y que les permita deslindarse de los yugos a los que han sido sujetas por criterios políticos, económicos, de crítica social, cultura y educación; que han propiciado que permanezcan en los círculos de violencia.
“Mientras la autoridad no dé respuesta y seguimiento a los trabajos que se han hecho con las mujeres que han sido violentadas y que han sido puestas a su consideración, entonces se continuará generando impunidad y mayor violencia hacia ellas”, subrayó.
Lamentablemente, agregó, la violencia se ha tornado en diferentes tipos, ya sea cibernética, verbal, intrafamiliar, movilidad, acoso sexual y laboral, donde en este último se ha comprobado que el sueldo de una mujer, es 30 por ciento más bajo al de un hombre, aunque realicen las mismas actividades.
